¿Cómo adaptar tu habitación para dormir mejor?

Un componente central de la higiene de sueño, más allá de los hábitos, es el entorno de tu sueño. Para favorecer que concilies el sueño fácilmente y tener un mejor descanso, es importante que tu dormitorio emane tranquilidad.

Si bien lo que hace que un dormitorio sea atractivo (y tranquilo) puede variar de persona a personas, estos consejos pueden ayudarte:

• Retira de tu habitación los dispositivos electrónicos.
• Mantén una linterna al lado de tu cama:
  Utilízala en caso de despertar nocturno para dirigirte al baño. De esta manera, evitarás encender luces de mayor intensidad que pueden alterar la secreción de melatonina.
• Configura una luz tenue para tu reloj despertador:
  Como ya lo mencionamos previamente, la luz artificial que emiten estos dispositivos pueden alterar tu sueño. Por lo que no olvides configurar con una luz “tenue” tu reloj despertador o aléjalo de tu cara. Si utilizas tu teléfono como despertador, gíralo boca abajo.
• Ajusta la temperatura de tu habitación:
  La temperatura ambiental es un factor importante a la hora de lograr un sueño de buena calidad. Según los expertos, la temperatura ideal para dormir consiste en ambientes térmicos neutros, las que varían según grupo etario:
  • Adultos: 16 a 21ºC
  • Ancianos: 19 a 21ºC
  • Bebés y niños: 18 a 21ºC

• Decora tu habitación como más te guste y elige (idealmente) cortinas blackout o persianas oscuras:
  Tu habitación debe relajarte y trasmitirte paz, por lo que, ¡elige colores de pared (idealmente fríos) y la decoración que más te guste!. Además, preocúpate que tu habitación sea oscura, de esta manera logramos bloquear el estímulo externo de luz.
• Ordena tu cama todas las mañanas:
  Se que para algunos les puede parecer muy difícil, pero diversos estudios muestran que las personas que lo hacen pueden dormir mejor por la noche (así que ¡Inténtalo!).
• Reemplaza tu colchón y almohada:
  Elige colchones, almohadas y sábanas que sean cómodas para ti. Intenta cambiar el colchón cada 10 años y las almohadas cada 2 años. Esto ayuda con la comodidad y evita la acumulación de alergenos.
• Ordena tu habitación:
  Si el desorden te estresa, date un tiempo y ¡ordena tu habitación! (verás la diferencia que se siente llegar a la noche a una habitación ordenada).
• Mantén a tus mascotas fuera de la cama:
  ¡Qué consejo más difícil!, pero si tu mascota te despierta durante la noche, acuéstala en una habitación diferente o, al menos, mantenla fuera de tu cama.

¡Espero que estos consejos te sean útiles!